jueves, 26 de enero de 2012

Conceptos de filosofía de la educación

A continuación cuatro conceptos alcanzados por diferentes autores para que ustedes los analicen como actividad de fin de curso:
El primer concepto corresponde a Ortega y Gasset (filósofo español que vivió entre 1883 y 1955) quien  escribió lo siguiente:
“si el maestro ha de ser pedagogo, ha de ser maestro filósofo. Este es el sentido que tiene la conversión herbartiana de la Pedagogía en ciencia formal. Desde entonces queda obligado el maestro a estrechar sus relaciones con la Filosofía”. (1952)
Mientras tanto María Montessori (educadora italiana que vivió entre 1870 y 1950) afirmó lo siguiente:
“El niño, con su enorme potencial físico e intelectual, es un milagro frente a nosotros. Este hecho debe ser transmitido a todos los padres, educadores y personas interesadas en niños, porque la educación desde el comienzo de la vida podría cambiar verdaderamente el presente y futuro de la sociedad. Tenemos que tener claro, eso sí, que el desarrollo del potencial humano no está determinado por nosotros. Solo podemos servir al desarrollo del niño, pues este se realiza en un espacio en el que hay leyes que rigen el funcionamiento de cada ser humano y cada desarrollo tiene que estar en armonía con todo el mundo que nos rodea y con todo el universo”.
Unos años más tarde Ricardo Nassif (pedagogía Argentino que vivió entre 1920 y 1984) sintetizaba lo siguiente:
“La Filosofía de la educación puede definirse como el conjunto de reflexiones sobre el hecho y el proceso educativo conectado con la totalidad de la cultura y del hombre, al mismo tiempo que la conciencia de la unidad y la dirección del obrar educativo”.
Más recientemente, en 2008  José Guadalupe de la Mora Ledesma, (filósofo mexicano) escribe en su obra “Esencia de la Filosofía de la Educación” la frase:
“Qué tremenda responsabilidad la del maestro: ser luz o ser oscuridad. Él no da lo que sabe, sino lo que es”.
Analicen estos conceptos y escriba sus juicios en 20 líneas

jueves, 19 de enero de 2012

Complejidad, Teoría del Caos y Transdisciplinariedad en Educación

Para esta fecha, 19 de Enero de 2012 quiero presentar una pincelada a la discusión contemporánea sobre el modo de pensar, de educar y de la manera como la sociedad se ha hecho enormemente compleja.

La sociedad actual, amarrada a una inmensa red de relaciones, se nos presenta como un ente hiperestimulado, capaz de contener enormes presiones que la complejizan y que constantemente estallan cual universo en expansión generando caos, incertidumbre y nuevas energías interventoras, las cuales a su vez acuden a complejizar más al asunto social.
La modernidad, como paradigma social aparentemente agotado, lo ha tratado de minimizar con la categoría conocida como globalización, pero nada es más inapropiado que esto para comprender la verdadera complejidad social y sus necesidades.

En el medio del problema está el sistema educativo, un producto de la modernidad social instalado por el sentido de la racionalidad desde el siglo XVIII, y que ya ha colapsado, dejando de explicar al sujeto histórico, a la ciencia y al progreso como componentes fundamentales del paradigma de futuro.
Para ilustrar esta crisis del paradigma de la modernidad como razón social, he seleccionado partes de dos textos que contienen a esta discusión: por una parte Rigoberto Lanz en dos segmentos de su texto llamado “Pensar la Universidad, Pensar en la Universidad” (Mayo de 2005 Uruguay) quien al ilustrar la categoría de crisis social presenta estas tres ideas:
“…Si lo que está en crisis es una civilización, su lógica fundante, sus conceptos pivotes fundamentales, entonces no estamos hablando para nada de una “crisis de crecimiento”, de un accidente, de una aceleración repentina, de una coyuntura inconveniente, de una anomia reparable; estamos hablando de una convulsión en la médula fundacional de la civilización que gobierna el globo terráqueo desde el siglo XVI…”

“…entró en crisis todo. Digamos que no hay ningún escenario, esfera, componente de la vida material o espiritual, que no haya entrado en crisis. Pero me gustaría marcar justamente la idea de crisis de fundamentos y, en especial, una cadena de conceptos fundacionales de esta Modernidad, que tienen que ver con la idea de razón, encadenada con la idea de ciencia, encadenada con la idea de progreso, encadenada con la idea de Sujeto, encadenada con la idea de Historia, encadenada también con la idea de educación y con la ética.”
“…la crisis es siempre una oportunidad; no es un concepto forzosamente negativo; para nada es una idea luctuosa, que nos haga resignar y encoger. Es un concepto siempre cargado de una doble significación. Que algo entre en crisis… ¡bienvenido! Que algo está en crisis es porque cosas buenas pueden pasar…”
Mientras tanto para explicar la categoría educación Lanz se centra en la idea de enseñar, para lo cual aporta la siguiente sentencia:
"lo que vale la pena enseñar es la capacidad de apropiación. La virtud más querida, más mimada, del hombre de hoy es su capacidad de capturar experiencias de todo género. Lo que deben estar enseñando, de verdad, es la inteligencia y capacidad para apropiarse: apropiación de la experiencia del otro, sobremanera. ¿En qué se diferencia la inteligencia de la torpeza? En que la inteligencia es capaz de apropiarse de la experiencia del otro. Los torpes no desarrollan experiencias de aprendizaje de esta complejidad y cometen siempre los mismos errores. Entonces, la idea de formación debe estar asociada a la experiencia cognitiva, ético-política, cultural, de nueva socialidad, de cooperación, de solidaridad con el otro."

En adición a estos planteamientos Los participantes del II Congreso Mundial de Transdisciplinariedad celebrado en Espirito Santo, Brasil, también en el 2005 asumen el problema de la complejidad social y la formación del ser humano en los términos que con exactitud transmite el siguiente texto:
“La Actitud Transdisciplinar : busca la comprensión de la complejidad de nuestro universo, la complejidad de las relaciones entre los sujetos, de los sujetos consigo mismos y con los objetos que los circundan, a fin de recuperar los sentidos de la relación enigmática del ser humano como la realidad, aquello que puede ser concebido por la consciencia humana es lo real como referencia absoluta y siempre velada. Para eso, propone la articulación de los saberes, de las ciencias, las artes, la filosofía, las tradiciones sapiencias y de la experiencia, que son diferentes modos de percepción y descripción de la realidad y de la relación entre la realidad y lo real.”
“La acción transdisciplinar propone la articulación de la formación del ser humano en su relación con el mundo (ecoformación), con los otros (hetero y co-formación), consigo mismo (autoformación), como ser (ontoformación), y, también, como conocimiento formal y no formal. Procura una mediación de los conflictos que emergen en el contexto local y global, visando la paz y la colaboración entre las personas y entre las culturas, pero sin desconsiderar los contradictorios y la valorización de su expresión…”
Un curso de Filosofía de la Educación debe comprometerse con las líneas de deseo futuras que la intelectualidad planetaria desarrolla para tratar de vencer la brecha entre realidad e interpretación de la realidad, entre historia e interpretación de la historia. Para este caso la cátedra asoma un estimulación hacia los linderos de la complejidad, la teoría del caos y la transdisciplinariedad como vehículos de futuro para viajar por la educación y la sociedad que debemos crear, no para detener la historia, como parece ser el deseo de la modernidad, sino para enriquecerla y entregar sus riendas con propiedad y responsabilidad a todos sus miembros.

jueves, 24 de noviembre de 2011

Docencia, televisión y el mito de las cavernas

A propósito de los mediso de comunicación y de la televisión en particular, quiero decir que este medio limita con el reino de las fantasías, no sólo con las actuaciones, sino también cuando transmite realidades y noticias en vivo y en directo y se convierte, querámoslo o no, en un actor educativo de altísima importancia y de gran capacidad de penetración en las conciencias de los individuos.
Así las cosas las fantasías del género telenovela se cuelan dentro del género de la noticia de TV confundiendo a la audiencia entre lo real y lo irreal.
Esto ocurre en el ámbito informativo cuando el aderezo ideológico hace el papel de la dramaturgia y exacerba sólo partes de la realidad  a representar.
El sociólogo y crítico cultural francés, Jean Baudrillard, muerto hace apenas tres años, hace uso de las categorías de análisis de la filosofía postmoderna donde militó, para decir que la figuración televisiva se escapa de la dominancia de lo real, para comprometerse con lo por él llamado el reino de los “simulacros”, para, bajo esa visión construir otra verdad, explicación para lo cual se auxilia en el verbo del chileno Jorge Luis Borges y sus “ficciones”.
Tal como lo sugieren estos dos autores, el mapa pasa a constituir al territorio, resultándole tan correspondiente, que no se pueden distinguir el uno del otro, la materia se confunde con la representación, y la representación se asume entonces como una esencia tan elevada que se convierte en una especie de nuevo topos uranos, que ahora llamamos televisión.
El mismo Platón, creador de la categoría topus uranos, nos da herramientas para entender esta problemática, a través del mito de las cavernas, creando imágenes y situaciones que representan interesantes parecidos con el mundo de la televisión y la noticia televisiva actual.
Las imágenes que los esclavos veían en la caverna de Platón, a través de las sombras de las realidades producidas por la luz del fuego, son un mapa, que al no existir otro parámetro, se convierten en el territorio, o al menos así lo son en la mente de los habitantes de la caverna impedidos para salir de ella. Si alguno de ellos saliera y reportara la existencia de otra realidad, los habitantes la rechazarían, por lo increíble de la información.
Esta situación, visualizada en el pensamiento griego del siglo IV antes de cristo, sigue presente y de actualidad, pues de alguna manera, la relación entre el televidente y la televisión funciona como la del mito. Se nos presenta una imagen que damos por verdad, con tal fuerza de penetración, que llegamos a convencernos de que ese mapa es en efecto la realidad.
En el centro de la confusión queda el docente con su profesión intelectual y crítica, impedido de comunicarse desde la realidad, debido a que el mito de la televisión, cubre toda la capacidad de entender de los sujetos y convierte en increíble a la realidad.

jueves, 17 de noviembre de 2011

Paulo Freire (1921-1997)

El profesor Paulo Freire es una leyenda de la educación moderna y en particular de la educación latinoamericana, guarda como mérito haber podido interpretar la miseria poblacional de este continente y el africano y haber levantado la voz acerca del papel de la educación en la transformación necesaria para esos gruesos números de ciudadanos que pululan por las calles de medio planeta, sin saber como poner a funcionar las bases del talento con las que están dotados.
Cuánto de la responsabilidad de este desperdicio de opciones humanas es posible adjudicar al propio ciudadano, cuánto al educador, cuánto al sistema de atención educativa y cuánto a los cuerpos gubernamentales, que no solo lo permiten sino que lo patrocinan.
El objeto de observar este video es sintetizar en veinte líneas que puede hacer usted como educador para interpretar la angustia de este educador e inspirar su acción educativa.
Siga la dirección electrónica presente a continuación, haga clik sobre ella, y exponga su conciencia y entendimiento al mensaje de Freire.
http://www.youtube.com/watch?v=pmcGbbmBr1I

lunes, 7 de noviembre de 2011

Recorrido y reto para la labor docente

La disipación como estrategia para construir el futuro, en el medio de la inestabilidad como plataforma del presente, parecen ser los marcos más generales para el trabajo del docente que se oponga a las rutinas y la sumisión con las que el poder suele esconder la dominación.

Formar al docente contemporáneo, realmente provisto de las herramientas teóricas que para el momento están disponibles, y además hacer esto, enseñando el ejercicio de la libertad de poder soñar en la escala particular, y poder interpretar en lo colectivo nuevas melodías pedagógicas, es la mínima responsabilidad que un formador de docentes actual se debe imponer en su trabajo.

En este juego de fuerzas está el germen de una nueva existencia social, la existencia del relevo sin clonación, en otras palabras  la visión de un futuro que no necesita ser anunciado, sino que pueda conseguir su lugar, abriendo las barreras sociales y liberando a la historia, con el fin de aperturar la posibilidad de nuevas vanguardias capaces de expresar su apetito por nuevos sentidos y valores, mismos que en el fragor de su existencia serán capaces de sustituir las tradiciones que los marasmos profesionales y el poder trasnochado intentan imponer.

             ¿Puede usted participar en esta aventura?

lunes, 31 de octubre de 2011

Filosofia, conciencia y acción educativa

Segunda tarea del Blog
Alberto Muñecas Vecchione
Partiré en esta oportunidad de un planteamiento del filósofo de la comunicación Alberto Pasquali
“…la tarea seminal de concienciar las sociedades acerca de un determinado problema tiene casi el mismo rango axiológico que el dar solución al problema mismo, pues sin sensibilización, sin conciencia previa y socializada de la necesidad de un cambio, el cambio mismo será incomprensible, efímero o inviable.”
Sobre este texto quiero agregar algunos contextos para estimular el análisis de los visitantes al blog
hay que ubicar la explicación dentro del fenómeno que llamamos globalización y distinguir que dentro del continuo histórico de la humanidad, vemos como la velocidad de aceleración del desarrollo humano es muy cercana a la forma como se expanden las formas de comunicación, así, la participación de Guttemberg con el libro impreso y de Marconi, Hertz, Popov y Tesla con las transmisiones inalámbricas de radio, para luego desencadenar la televisión y la mass media  marcan la fuerza de la comunicación y el evidente protagonismo de los medios de comunicación dentro del continuo humano,como consecuencia podemos hablar en la actualidad de la aldea global, tal como lo calificó en 1964  el sociólogo canadiense Marshall McLuhan, pero el germen de todo sigue siendo la cálida relación del niño y joven con su docente. De ahí se desprende el perfil personal del protagonista y el grado de humanidad de la sociedad donde él existirá.

Viendo a la educación entonces desde este núcleo de análisis, somos comunicación personal y cálida y eso nos hace pedagogos, sin embargo desde Pasquali obtenemos como ganancia el concepto de que la educación es un acto comunicacional hermenéutico extendido en la especie humana y germen del desenvolvimiento cultural.
En otra mirada del tema nuestro profesor Anibal Lárez ofrece otros argumentos prometedores que estructuran a la educación como un acto comunicacional de modelación perceptiva, basada entre otras categorías en la alteridad o la idea de ver al otro teniendo en cuenta creencias y conocimientos propios del otro, con el fin de alterar los conceptos propios preconstruidos por el yo. 
Estos dos juicios parecen ser una base energética  importante para la construcción de un modelo de formación pedagógica otro, que intente detectar la razón por la cual los docentes tienden a mantenerse adosados a las bases ancestrales del conocimiento pedagógico, sin someter esos planteamientos a la duda, la discusión o la ampliación, produciendo como consecuencia la perennización de un modelo que para nada da cuenta de la realidad y no produce en forma alguna la reconstrucción del modelo.
La resistencia al cambio social en materia de pedagogía o al menos la negativa de adaptación de la misma a los recursos del saber disponibles para esta época, es una condición dominante en la sociedad venezolana, y todos estamos sometidos a esta desafortunada  tendencia.
Un hecho muy prometedor para nuestra profesión y la sociedad sería dilucidar las razones de este fenómeno y salirle al paso desde nuevas generaciones educativas como la que ustedes protagonizarán.

jueves, 13 de octubre de 2011

Objeto de estudio de la filosofìa de la educaciòn

Razonamiento inicial:

Este es el Blog comunicaciòn entre los participantes de las secciones 01 y 02 del curso de filosofía de la educación UPEL IPM Octubre 2011 Febrero 2012, el cual se desarrollará a través de una responsabilidad colectiva manejada por los alumnos de este curso y el profesor Alberto Muñecas Vecchione.

El curso será una reflexión destinada a crear docentes constructores de soluciones viables a los problemas educativos que se presentan en el campo de acción de docentes y estudiantes en cualquiera de las modalidades y niveles educativos del sistema social de formación.

Se trata de un enriquecimiento de la capacidad de comprensión del intelectual docente, con el fin de que identifique y se separe de cualquier intromisión ideologizadora y/o cercenadora de la libertad y/o la autonomía que deben acompañar a la condición intelectual, como un derecho humano básico.

El hombre intelectual es un sujeto vacunado contra la alienación, dispuesto a convertirse en un transformador constructor capaz de liberar a la sociedad de las fórmulas de poder que a través de la historia han tratado y tratan de detener la condición creadora del colectivo y el individuo.

Desde el piache y cacique tribal, hasta el dirigente político o militar, el poder que ellos ejercen es irremediablemente conservador de una lógica social que le es favorable a la élite que lo sostiene y en consecuencia siempre opuesto a los poderes creadores y reformadores del ser humano. El poder se aplica con exquisita preferencia en las dinámicas de los procesos escolares, los cuales son habitualmente cercenados a través de la lógica administrativa del programa de clases, el currículo, la evaluación, la supervisión y la coerción administrativa y laboral.

El docente que se viste ciegamente con estas armaduras decimonónicas de la teoría educativa, se convierte en una especie de fósil medieval que reproduce los mecanismos clásicos del poder usualmente vinculados al ocultamiento y el engaño sobre la realidad, Estos docentes marcadores del poder se expresan regularmente por la vía del cumplimiento estricto de las obligaciones socio-estructurales del sistema, guarida muy eficiente del quietismo que el poder desea de sus gobernados. Adicionalmente el docente reproductor del poder suele regirse por la aplicación de sus propios y anacrónicos códigos, arrancados desde las profundidades del mar de sus alienaciones, constituyendo un escenario educativo que no se recrea, sino que se repite rutinariamente.

A partir de la comprensión de estos procesos, el curso de Filosofía de la Educación persigue que cada participante desarrolle una aguda capacidad crítica, con el fin de derrocar, desde la semilla de lo socio-civilizatorio (léase escuela), todo intento totalitario de secuestrar el atributo humano de la libertad, sea cual sea el actor social que lo patrocine o imponga.

La base de la libertad se residencia, de acuerdo a esta interpretación, en la capacidad crítica de investigación personal y colectiva multideterminada y automotivada para la creación de capital civilizatorio en cualquiera dimensión y en todas sus opciones, guardando como únicos límites a la ética y la moral de la época en que aparezcan las creaciones.