jueves, 24 de noviembre de 2011

Docencia, televisión y el mito de las cavernas

A propósito de los mediso de comunicación y de la televisión en particular, quiero decir que este medio limita con el reino de las fantasías, no sólo con las actuaciones, sino también cuando transmite realidades y noticias en vivo y en directo y se convierte, querámoslo o no, en un actor educativo de altísima importancia y de gran capacidad de penetración en las conciencias de los individuos.
Así las cosas las fantasías del género telenovela se cuelan dentro del género de la noticia de TV confundiendo a la audiencia entre lo real y lo irreal.
Esto ocurre en el ámbito informativo cuando el aderezo ideológico hace el papel de la dramaturgia y exacerba sólo partes de la realidad  a representar.
El sociólogo y crítico cultural francés, Jean Baudrillard, muerto hace apenas tres años, hace uso de las categorías de análisis de la filosofía postmoderna donde militó, para decir que la figuración televisiva se escapa de la dominancia de lo real, para comprometerse con lo por él llamado el reino de los “simulacros”, para, bajo esa visión construir otra verdad, explicación para lo cual se auxilia en el verbo del chileno Jorge Luis Borges y sus “ficciones”.
Tal como lo sugieren estos dos autores, el mapa pasa a constituir al territorio, resultándole tan correspondiente, que no se pueden distinguir el uno del otro, la materia se confunde con la representación, y la representación se asume entonces como una esencia tan elevada que se convierte en una especie de nuevo topos uranos, que ahora llamamos televisión.
El mismo Platón, creador de la categoría topus uranos, nos da herramientas para entender esta problemática, a través del mito de las cavernas, creando imágenes y situaciones que representan interesantes parecidos con el mundo de la televisión y la noticia televisiva actual.
Las imágenes que los esclavos veían en la caverna de Platón, a través de las sombras de las realidades producidas por la luz del fuego, son un mapa, que al no existir otro parámetro, se convierten en el territorio, o al menos así lo son en la mente de los habitantes de la caverna impedidos para salir de ella. Si alguno de ellos saliera y reportara la existencia de otra realidad, los habitantes la rechazarían, por lo increíble de la información.
Esta situación, visualizada en el pensamiento griego del siglo IV antes de cristo, sigue presente y de actualidad, pues de alguna manera, la relación entre el televidente y la televisión funciona como la del mito. Se nos presenta una imagen que damos por verdad, con tal fuerza de penetración, que llegamos a convencernos de que ese mapa es en efecto la realidad.
En el centro de la confusión queda el docente con su profesión intelectual y crítica, impedido de comunicarse desde la realidad, debido a que el mito de la televisión, cubre toda la capacidad de entender de los sujetos y convierte en increíble a la realidad.

jueves, 17 de noviembre de 2011

Paulo Freire (1921-1997)

El profesor Paulo Freire es una leyenda de la educación moderna y en particular de la educación latinoamericana, guarda como mérito haber podido interpretar la miseria poblacional de este continente y el africano y haber levantado la voz acerca del papel de la educación en la transformación necesaria para esos gruesos números de ciudadanos que pululan por las calles de medio planeta, sin saber como poner a funcionar las bases del talento con las que están dotados.
Cuánto de la responsabilidad de este desperdicio de opciones humanas es posible adjudicar al propio ciudadano, cuánto al educador, cuánto al sistema de atención educativa y cuánto a los cuerpos gubernamentales, que no solo lo permiten sino que lo patrocinan.
El objeto de observar este video es sintetizar en veinte líneas que puede hacer usted como educador para interpretar la angustia de este educador e inspirar su acción educativa.
Siga la dirección electrónica presente a continuación, haga clik sobre ella, y exponga su conciencia y entendimiento al mensaje de Freire.
http://www.youtube.com/watch?v=pmcGbbmBr1I

lunes, 7 de noviembre de 2011

Recorrido y reto para la labor docente

La disipación como estrategia para construir el futuro, en el medio de la inestabilidad como plataforma del presente, parecen ser los marcos más generales para el trabajo del docente que se oponga a las rutinas y la sumisión con las que el poder suele esconder la dominación.

Formar al docente contemporáneo, realmente provisto de las herramientas teóricas que para el momento están disponibles, y además hacer esto, enseñando el ejercicio de la libertad de poder soñar en la escala particular, y poder interpretar en lo colectivo nuevas melodías pedagógicas, es la mínima responsabilidad que un formador de docentes actual se debe imponer en su trabajo.

En este juego de fuerzas está el germen de una nueva existencia social, la existencia del relevo sin clonación, en otras palabras  la visión de un futuro que no necesita ser anunciado, sino que pueda conseguir su lugar, abriendo las barreras sociales y liberando a la historia, con el fin de aperturar la posibilidad de nuevas vanguardias capaces de expresar su apetito por nuevos sentidos y valores, mismos que en el fragor de su existencia serán capaces de sustituir las tradiciones que los marasmos profesionales y el poder trasnochado intentan imponer.

             ¿Puede usted participar en esta aventura?